(Traducción: Lorenzo Fino)
Mientras la IA sigue avanzando, realizo mis cursos y workshops para periodistas y otros creadores de contenidos basándome en un tópico matizado hasta la superficie: la intrincada relación entre creatividad, tecnología y consciencia humana. Todo en contexto con la IA, que también nos lleva a contemplar las profundas implicancias existenciales que nacen de una fusión entre el arte y la ciencia en la era digital.
Tan intrincado está, que las relaciones entre ambos (arte y ciencia) sitúan su dificultad en la escritura de mis cursos sobre IA. Conducir una sesión de entrenamiento específica para la creación de prompts efectivos, por ejemplo, me hace preguntarme si mi frase «la danza entre los humanos y los robots» realmente se entiende. Los participanes quieren respuestas basadas en el razonamiento traidiconal, en lo tangible y en lo que pasa ahora y nada más que ahora.
En momentos como este, vuelvo a un artista asociado con lo loco y lo irracional. Salvador Dalí, quien en uno de sus largos ensayos, «La conquista de lo Irracional» (1935), respondió a mis preguntas. Lo sobrevalorado como sensación de apego a las cosas que muchas personas describen como racional:
«Nadamos entre lo que parecen ser dos formas del agua. La fría del arte y la caliente de la ciencia».
(He decidido incluir extractos del ensayo citado como capturas debajo de las ilustraciones en este post)
Los miedos y dudas de la IA
La frase acerca de el agua caliente y el agua fría de Dalí puede ser metafóricamente conectada con el estado actual de duda acerca de las Inteligencias Artificiales. En esta analogía, el agua fría del arte representa lo subjetivo e imaginativo de la creatividad humana como expresión. Puede ser enlazado a otros aspectos artísticos de la IA, en dónde los algoritmos son usados para crear piezas de arte, música o literatura. Lo único que aumenta entonces son las preguntas acerca de la escencia de la creatividad, originalidad y el rol del humano en la intuición y emoción del proceso artístico. En genral respondo con otra pregunta, ¿Existe realmente la creatividad artificial?
Por otra parte, el agua caliente de la ciencia simboliza lo lógico, racional y sistémico del acercamiento científico al avance tecnológico. En este contexto de IA, se refiere a como se desarrolla su evolución. Algoritmos y procesos de aprendizaje mecánicos que analizan datos y resuelven problemas pueden simular inteligencia humana. Simularla, no copiarla. Porque no hay nada más racional o científico que eso. Este agua caliente le da de comer a la IA hoy en día y nosotros, como creadores de contenido, podemos usarla para inspirarnos en ciertos tópicos, o servir como el cerebro que hace la fuerza mayor en la acumulación de datos y transcripción para la investigación. La juxtaposición de las dos «aguas» refleja la tensión entre lo artístico y lo científico en términos de IA. Hay un diálogo constante entre la creatividad IA y sus cuestiones técnicas que terminan por liderar una fusión entre arte y ciencia que interpreta las nuevas tecnologías.
La fusión de arte y ciencia por creadores de contenido
Para los periodistas, la fusión entre arte y ciencia no está limitada solo a los procesos de la IA. Al menos no a los de hoy. Desde que internet forzó su entrada a las redacciones allá por 1996, los periodistas tuvieron que adaptarse a lo que hacían escritores, editores y diseñadores para satisfacer sus necesidades tecnológicas. En este caso, el del storytelling móvil, la nueva tecnología redefinió el género de las noticias escritas y alteró la estructura del consumo de las historias. En este proceso, lo tradicional y convencional para los lectores cambió. No veían fotos y después texto, acomodado en tradicionales piezas impresas, sino con los elementos intercambiandosé entre sí.
Es cierto además que la fusión entre arte y ciencia está en un límite no muy claro y me pregunto ¿Si los que hoy son dueños del contenido, también lo son de la IA? ¿Y si el bot alucina y fabrica información errónea? ¿A quién se le da el crédito cuando se usa una ilustración generada por IA? Con esta fusión, la tecnología y la creación de una historia no hace filosofía sobre lo que está bien o mal. Es una fusión que fluye naturalmente. Y así, tanto agua fria como caliente separan disciplinas que parecen tener dificultades para converger. Aunque no por mucho.
En su ensayo Dalí menciona la profundidad agitada y lo irracional de la moral hiperlúcida. Captura lo complejo y también lo polarizador y contradictorio de la IA. Mientras sus sistemas pueden exhibir problemas de creación bastante obvios, su solución de problemas y toma de decisión gravita en lo inherente a los problemas éticos. Hay ambiguedad, al estilo espejo de las experiencias de correr contra la corriente. Navegar estas aguas para la IA puede tener potenciales dificultades.
El lado positivo
Sí, esas son las aguas turbias en las que navegamos con la IA, especialmente en las redacciones, donde el cambio es lento y el apego a las prácticas heredadas es más sólido. Sin embargo, mientras escribo este blog, tengo la esperanza de ver muchos desarrollos favorables de la IA:
- Justo esta semana, Quartz reportó que la «IA generativa se presenta como la nueva oportunidad para reportar procesos de storytelling. Ayuda a copiar, editar y marcar los insights en la data. La IA puede en algunos casos equiparar a los periodistas, por las herramientas fuertes que tiene para elevar su propia vara. Mientras la tecnología evoluciona, toma eficiencia y compromiso para el mundo de las noticias»
- The New York Times y The Washington Post nombraron editores para encabezar las iniciativas IA. The New York Times nombró a Zach Seward. Pueden ver sus comentarios en el siguiente link.
- The Washington Post nombró a Phoebe Connelly. Pueden ver sus comentarios en el siguiente link.
Finalmente, mis estudiantes de la Universidad de Columbia están preparando sus proyectos finales en dónde deben examinar un área de IA para la creación de contenido en dónde la utilización de ésta le ha ofrecido a los periodistas un valor agregado. Mientras estos proyectos esperarán al seis de mayo, puedo ver que los tópicos de fusión entre arte y ciencia y entre agua caliente y agua fría, parecen avanzar bien. Creo que Dalí nos ayudará a entender como se amalgaman ciertos aspectos de la IA en nuestra vida, y quizás nos permita abrir la mente para conquistar lo irracional.